sábado, 4 de junio de 2011

El pico Aneto

Después de apagarse  las últimas ascuas de la inmensa hoguera que provocó la muerte de la diosa Pyrene, poco a poco, todo empezó a renovarse, a llenarse de  vida y alegría, primero las nieves lo cubrieron todo y luego, con el deshielo de la primavera  se deshilacharon en miles de riachuelos que fueron empapando los prados y los bosques crecieron de nuevo.

Las flores de nieve volvieron; las águilas y los quebrantahuesos volaban por los riscos y las ardillas y las mariposas, los osos y todos los animales del bosque lo devolvieron a la vida, así que por fin el Pirineo se convirtió en el precioso jardín que ahora conocemos. Y pronto también, los gigantes prendados desde siempre de ese parque se adueñaron de él.

Sabemos,  porque los antiguos griegos así nos lo contaron, de la lucha titánica de los gigantes con los dioses. Según éstos sabios, los gigantes colocaban montaña sobre montaña para desalojar a los dioses del Olimpo, manejaban los grandes árboles que encendían para convertirlos en antorchas y los blandían amenazadores contra el cielo para provocar el pánico a los hombres y a los dioses.

Decían los oráculos que los dioses jamás podrían ganar a los gigantes si no luchaba con ellos algún mortal pero finalmente, fueron los dioses, con la ayuda de Heracles,  los vencedores y aquella raza terrible y maldita de los gigantes desapareció de la tierra, aunque alguno de ellos logró escapar y se escondió. 

Entre los gigantes que se escondieron en las montañas había uno llamado Netu que era el mas perverso de todos ellos.  Era pastor y todo lo quería para su ganado y todo aquello que se cruzaba en su camino y no era de su agrado le hacía presa de la furia. Era muy cruel y en mas de una ocasión, si se cruzaba con algún hombre se lo tragaba. Netu era altivo, cruel, siempre enfadado y disfrutaba con su maldad.

Cuenta la leyenda que un día apareció en el valle un peregrino. Nadie sabía quién era ni de donde venia, vivía casi de limosna o trabajando en lo que le pedían, con muy poco se conformaba.

Al atardecer y una vez que finalizaba su trabajo, cuando lo había, jugaba con los niños y les contaba preciosas historias. Enseguida se ganaba el afecto de todo el mundo, y cuando veía a todos en armonía se marchaba a otro lugar, era como si él fuera sembrando la paz.  Sabían que quería cruzar la montaña y quisieron disuadirlo pues tendría que pasar por los dominios de Netu,  él los tranquilizo diciéndoles  que él nunca se había peleado con nadie que no temieran, así que cogió su hatillo y marchó hacia el norte a cruzar el Pirineo.

Hacía mucho calor y fue agotando las provisiones que le dieron en el pueblo pero continuo su camino. Sudoroso y casi agotado diviso a lo lejos un vallecito y  un rebaño, pensó  que  por lo menos allí habría agua  y podría ayudar a los pastores a cambio de un churrusco de pan. La marcha le resulto dura y fue al atardecer cuando alcanzó el valle.


De súbito se encontró frente al gigante, era enorme, con barbas, sucio y con cara de pocos amigos. Sin ningún temor se acerco a pedirle agua, Netu altivo se la negó, diciéndole que el agua era para su rebaño, y que se fuera antes que se arrepintiera y le impidiera marchar.
El peregrino con voz tranquila le respondió:

Veo que tienes el corazón duro como la piedra. Ojala que todo tú te conviertas en  piedra.


En el mismo instante que el peregrino pronunció estas palabras el gigante quedó petrificado y convertido en lo que hoy es: el pico  de  Aneto.




4 comentarios:

El rey lagarto dijo...

Bon dia Mcb,

Me gusto ver como Netu se convirtio en el Aneto, y pensar que he andado por encima de el y le he tocado la calborota :)

No hay gigantes imposibles !

Precios jardin el que dibujaste...como siempre.

Besos.

MCB dijo...

Bon dia Rey

Me consta que le has tocado la calvorota, no esperaba menos de todo un Rey jaja.

Dan ganas de perderse en ese jardin.

Por cierto ¿sigues subiendo a la montaña? Hace mucho que no nos cuentas nada.

Besos

El rey lagarto dijo...

Hola Mcb.

Seguimos haciendo cosas pero nos han roto un poco el grupo y hemos perdido al fotografo, sin fotos las historias ya no son lo mismo, al final quizas vuelva a contar algo aunuqe no tenga nada que enseñar.

MCB dijo...

Hola.

Vaya que faena lo del fotografo. Es verdad que las historias con fotos ganan bastante, pero a ti se te daba bien contar las ascensiones, así que animate y siempre puedes recurrir a Internet para alguna fotografía del sitio al que vayais.