lunes, 22 de noviembre de 2010

Petirrojo

Petirrojo

Estoy leyendo un libro que se llama “Petirrojo”. La historia se sitúa en Oslo en el año 2000 con flashback, hasta el momento, al año 1942 en el frente ruso de Stalingrado y al año 1943 en Austria, durante la II Guerra Mundial. Hoy me he encontrado el siguiente comentario por parte de uno de los personajes:

“Hay quien dice que es una crueldad enseñar a los caballos a danzar, que el animal sufre al tener que hacer cosas que van contra su naturaleza. Pero quienes así piensan, no han visto entrenar a estos caballos. Yo, en cambio, sí los he visto. Y, créeme, les encanta. ¿Sabes por qué?

Porque obedece al orden de la naturaleza. Dios, en su sabiduría, ha organizado el mundo de modo que las criaturas inferiores sean más felices cuando pueden servir y obedecer a las superiores. No hay más que observar la relación entre niños y adultos. O entre hombre y mujer. Incluso en los llamados países democráticos, los débiles ceden voluntariamente el poder a la elite, más fuerte e inteligente que ellos mismos. Así son las cosas. Y, puesto que todos somos criaturas de Dios, es responsabilidad de todo ser superior procurar que los inferiores se sometan.”

No cabe la menor duda de que quien pronuncia esas terribles palabras es un nazi.  En otra ocasión es posible que estas palabras me hubieran parecido muy fuertes, pero en esta me parecen terribles, quizá porque a veces todo confluye hacía un mismo tema.

Sin ir más lejos, ayer El País publicaba las cartas secretas que uno de los nazis más buscado, Aribert Heim, el carnicero de Mauthausen o el Doctor Muerte, escribió a su hermana Gerda desde su escondite en El Cairo. Una de las muchas acusaciones que pesaban sobre él:

Mauthausen 

"Un preso judío de Praga se presentó con una hinchazón en la pierna izquierda. El acusado le dijo que le iba a operar. Cuando el hombre desnudo estuvo sobre la mesa de operaciones, le abrió el vientre sin anestesia y sacó el hígado, el intestino y el bazo. La víctima murió sufriendo de modo atroz".

Hace muchos años, una amiga me dejó el libro “Los médicos malditos”, en el que se relataban los atroces experimentos que realizaban con los judíos en los campos de concentración. Es realmente espeluznante.

Y hoy se publica la muerte de Samuel Kunz que durante años fue el tercer nazi más buscado del mundo y que ha muerto antes de ser juzgado. 


Además tenemos la controversia en torno al “Valle de los Caídos”. En este tema tengo sentimientos encontrados, por un lado no creo que se deba volar la cruz como pretende la Federación de Foros por la Memoria, entre otras cosas porque fue hecha por los presos políticos republicanos, pero sí que estoy totalmente de acuerdo con que se retiren los restos de  Franco y de José Antonio.

El Valle de los Caídos, para mí, representa un monumento a la soberbia, prepotencia y egolatría de una persona: Franco

Los faraones al morir se hacían acompañar a la tumba por sus esclavos, y como si de un Faraón se tratará él se hizo enterrar con miles de presos republicanos, sin el consentimiento de sus familiares, en concreto se estima que están enterradas 33.847 personas de las cuales solo 21.317 están identificadas.

Obreros en el Valle de los Caidos

El día 20 de Noviembre, como todos los años en esa fecha un grupo de seguidores de Franco así como neonazis se reunieron en el Valle de los Caídos como homenaje al dictador. Otro grupo más reducido convocado por la Federación de Foros por la Memoria también se concentró allí para reclamar la voladura de la cruz, la retirada de los restos de Franco y José Antonio, y convertir el recinto en un museo de la memoria.

“¿Sabéis cuántos guarros vienen? Se van a enterar”, decía uno. “Estos quieren ganar ahora la Guerra Civil. Vamos a tener que volver a sacar las escopetas a la calle” respondía otro.

Hay cosas que no se deben de olvidar nunca para que no vuelvan a suceder. 

6 comentarios:

El rey lagarto dijo...

Bon dia Mcb

Tu ultima frase lo dice todo y sirve como resumen.

Cuantas atrocidades ha llegado ha hacer el hombre? Hay cosas que nos parecen increíbles por mucho que no lo digan pero están ahí.

MCB dijo...

Pues si, se han hecho muchas atrocidades, muchas mas de las que conocemos. Quien sabe si eso cambie algún dia.

Bona nit

catacaldos dijo...

Estoy de acuerdo en que no se vuele , y en que se retiren esos dos cadáveres podridos , que ya lo estaban en vida , porque la memoria es frágil y hay que ayudar a mantenerla. Uno de mis abuelos fué uno de los dos encargados generales de las obras y el otro combatió por la república en el mismo sitio que se levanta ahora la cruz, así que tengo motivos dobles para respetar ambas memorias .Y para defender que se recuerde algo que nunca debió ser.

MCB dijo...

Catacaldos, lo tuyo es un buen ejercicio de conciliación y así debería ser para todos. Lo triste es que todavia despues de 70 años que terminó la guerra civil sigan pasando estas cosas.

trippero dijo...

En los años cuarenta los crimenes nazis, los cometían los nazis. pero es triste darse cuenta de que en el siglo XXI, los crímenes nazis, los comete genete sin escrúpulos de todos los pelajes en el tercer mundo, mutilando a los pobres sin remedio, para satisfacer las necesidades de órganos de los demócratas del primer mundo. Mientras tanto las genetes de buena fe, pulsan el botón del mando a distancia del televisor, cuando los miserables pretenden contar su lamentable historia en algún telediario. Siento decirlo, pero me siento cada vez un poco más nazi.
Espléndido artículo, bueno otro más.

MCB dijo...

Gracias Tripper, lo dicho anteriormente. Ademas hay que añadir que el hecho de traficar con órganos conlleva que la gente desconfíe y no haya tantas donaciones como sería deseable. Claro que eso daría para otra entrada.